Nos ha tocado vivir en tiempos complicados. Una crisis sanitaria nos ha pillado de repente y hemos tenido que reinventarnos. Hemos tenido que quedarnos en casa mientras los sanitarios luchaban contra un virus que ha cambiado nuestras vidas.
Muchos de nuestros proyectos se cancelaron, producciones que teníamos pendientes, pedidos ya en marcha y otros que empezaban a trabajarse se esfumaron de repente. La incertidumbre crecía, así como la frustración de nuestros clientes que también veían cómo sus planes de futuro, sus eventos y sus proyectos frenaban en seco.
Hay que reconocer que el coronavirus ha supuesto un duro golpe para una empresa como la nuestra. La fabricación de productos a medida requiere tiempo, pero sobre todo, requiere que nuestros clientes puedan celebrar eventos, congresos donde entregar esos productos, y si todo eso no puede hacerse, nosotros tampoco podemos hacer nada.
¿No podemos hacer nada?
En el medio de esta batalla contra el virus había un evento sin precedentes. Sanitarios de todo el mundo combatían en hospitales dejándose la piel. Resistiendo.
Es ahí cuando pensamos… “Bueno, no podemos hacer pins personalizados para nuestros clientes, pero sí podemos hacer unos pins para darle las gracias a los que salvan vidas”
Con esa premisa, y con la ayuda desinteresada de algunos de nuestros amigos nos pusimos a trabajar. Diseñamos una chapa con un logo que simbolizara el momento que estábamos viviendo, una pandemia mundial, incluímos el título de la canción de estos meses, ‘Resistiré’, y el eslogan que no podía faltar: ‘Este virus lo paramos todos’.
A los pins le añadimos una tarjeta bonita con aplausos, dando las gracias por el esfuerzo realizado y con nuestro instagram para que la gente se animase a mandarnos las fotos con nuestras chapas puestas.
Las muestras de cariño no tardaron en llegarnos.
Nuestros héroes y heroínas
Nuestras chapas metálicas se entregaron en cuatro puntos de España donde se estaba trabajando para parar la epidemia. Sevilla, Madrid, Cádiz y A coruña. Trabajadoras de esos hospitales a los que mandamos las chapas se encargaron de repartirlas entre sus compañeros y compañeras y aquí tenemos algunas de las divertidas fotos que nos mandaron.
Los pequeños detalles pueden marcar la diferencia
No nos cansamos de repetirlo, un pin es un producto pequeño y que a simple vista puede carecer de valor. Peroun pin personalizado es un recuerdo, y un recuerdo para siempre en un momento tan crucial de nuestras vidas tiene un valor incalculable.
Ponerse la chapita en el uniforme, con un diseño que te represente, y ver que todos tus compañeros la llevan crea un vínculo especial en esos momentos tan duros. Les recuerda que no nos olvidamos de ellos, que les mandamos todas nuestras fuerzas, y le hablamos de que es un detalle muy pequeño para todo el trabajo que ellos están realizando y que nunca olvidaremos, y es que si hablamos de recuerdos, esto va a ser algo que nos cambie para siempre.
Nuestros colaboradores
En esta tarea de crear los pins, colocarlos en tarjetas y enviarlos a todos los puntos requeridos tuvimos la colaboración desinteresada de muchas personas, dejamos sus nombres para que tengan presente nuestro agradecimiento:
Desde Hephaestudio, y con la colaboración desinteresada de algunos de nuestros amigos, hemos creado unas chapas en diferentes puntos de España donde se está luchando contra el COVID19.
Parece que lo peor ya ha pasado, pero el trabajo de los sanitarios sigue siendo igual de importante, y nunca olvidaremos su esfuerzo.
Esto es solo un pequeño detalle, un pequeño recuerdo, para que nunca olvidemos a los que están ahí jugándosela por nosotros.
Muchas gracias de nuevo por vuestro esfuerzo.
Con la colaboración de:
Ismael
Dámaris
Loren
Bea
Inés
Patricia
Jaime
Miguel
Pablo
Carlos
Merche
Nerea
Sara
El equipo de Hephaestudio